LB

Eso era todo, volver a correr, correrse
Disimular
Apretar los dientes e insistir que era lo mejor que nos estaba sucediendo
Justificar la fiebre
Arremeter contra la noche, que estamos demasiado crecidos para empapar la cruz y al habitante
Hacernos famosos

Sí, eso era todo
Vivir en el bolsillo de lo prohibido
De lo incierto
Y que no termine nunca,
Que la duda nos acoja generosa

Y hacernos falta
Quince años antes
Quince después
Con sopor adolescente
El pulso apresurándose
Cien, doscientos, trescientos…

Veces
Balcones y amoríos
Era lo mejor que nos estaba sucediendo.

Once

Cuando te vi
Ya para entonces
Habitabas en mis huesos
En mi boca ajada
Como una luz deformándose
En la memoria

Ya te quería
Con saltitos edulcorados
En la piel
Ganas desmesuradas de llevarte para siempre
En los agujeros que va dejando la lluvia
A veces me advertías
Y también rompías a llorar

Tanta flor
Tanto verano
Tantas piernas descruzándose
Y altamar
Para soñar, para volver a vivir.
El olor de la angustia
Encrespado en la memoria
Años sin suceder
Entre sí
Como hilos desmejorados entre los dedos
Te recuerdo así
Con mi atuendo
Con mi andar
Escapando de las voces
Del silencio
Del telón absurdo y ruboroso
De mis mejillas
Angustia
Lo era todo
Ausentarse a saltos
Cohabitar alveolos
Rubios, putrefactos.